Se trata de un error al allanar una vivienda en búsqueda de un celular robado de un funcionario de seguridad.
Se trata de un insólito error que cometió la policía bonaerense el miércoles por la noche, al intentar ingresar a una vivienda en búsqueda de un teléfono celular robado, los uniformados ingresaron a la vivienda equivocado.
Los efectivos policiales derribaron la puerta del hogar, la cual estaba tasada en alrededor de $300.000. Inclusive le tiraron gas pimienta al perro, ante la sorprendida y confusa mirada del funcionario.
Tras ingresar en la casa de un funcionario del Ministerio de Seguridad de la Provincia de Buenos Aires, los uniformados que realizaron el allanamiento se dieron cuenta que se trataba de un error de ubicación y por ende había ingresado a la vivienda equivocada.
El insólito allanamiento tuvo lugar alrededor de las 12 de la noche, en la calle 430 y 132 en Villa Elisa.
Sin embargo la policía afirmó que se trata de un error proveniente de la orden judicial: “No hubo error, la orden judicial señalaba ese domicilio” indicaron las fuentes vinculadas al caso.