También brindará una conferencia de prensa junto a referentes de decenas de organizaciones que lo integran.
La mesa multisectorial nucleada en el marco del Consejo Social de la Universidad Nacional de La Plata, organizó para este jueves una olla popular y una conferencia de prensa con la consigna “El Hambre es Urgente“.
El objetivo es “dar visibilidad a la grave situación que atraviesan los barrios de la región en materia alimentaria”, según se informó.
La charla con los medios está prevista para las 13.30, en el aula 201 del edificio Sergio Karakachoff (48 entre 6 y 7, La Plata)
“Invitamos también a participar de una jornada que busca fomentar la elaboración de políticas para favorecer el acceso a alimentos y servicios esenciales en estos territorios. Las actividades iniciarán el mismo 8 de agosto a las 12hs con una olla popular en las inmediaciones del edificio de Presidencia de la UNLP y continuará con un esquema de trabajo en comisiones”, detallaron desde el Consejo.
El documento del Consejo Social
La región se organiza
Los abajo firmantes, reunidos en el marco del Consejo Social de la Universidad Nacional de La Plata, manifestamos nuestra preocupación y compromiso frente a la grave situación que atraviesan miles de familias de la región que en este tiempo no tienen garantizado el derecho humano a la alimentación y a la seguridad alimentaria reconocidos en instrumentos jurídicos nacionales e internacionales.
El derecho a la alimentación no se reduce al acto de ser alimentado, sino al derecho a alimentarse en condiciones de dignidad, satisfaciendo nuestras necesidades con el propio trabajo y con el acceso a recursos que permitan producir o comprar los alimentos.
La creciente desocupación y la consecuente pérdida del poder adquisitivo de los ingresos que aún conservan, genera que decenas de miles de familias enfrenten cotidianamente condiciones que dificultan el acceso diario e indispensable a los alimentos, debido al incremento sostenido del precio de los mismos alimentos, así como del combustible para cocinar y calefaccionar, y del transporte.
Los informes del Observatorio de la Deuda Social de la UCA, de UNICEF Argentina, del Observatorio Socioeconómico de la UCALP y del propio Consejo Social dan cuenta de la gravedad de la situación, describen con precisión cómo la vida cotidiana de las familias se deteriora a lo largo de los meses y alertan sobre las consecuencias –materiales y simbólicas- que esto tiene en el presente y en el futuro de niños, niñas, adolescentes y de otros grupos vulnerabilizados como personas adultas mayores, personas con discapacidad, entre otras.
Frente a esta acuciante problemática social, el Estado nacional, por un lado retira la asistencia alimentaria a comedores, merenderos y otros sitios de distribución de alimentos, incumpliendo su deber de garantizar ese derecho humano esencial. Y por otro, profundiza su disputa con las organizaciones sociales, desconociendo el papel decisivo de éstas, -junto a los clubes de barrio, las iglesias y otros espacios comunitarios- en el sostenimiento de la vida de las familias, ofreciéndoles espacios territoriales de asistencia y acompañamiento. Estas acciones no sólo tratan de aportar alimentos, sino contención en una coyuntura donde las dificultades en el acceso a un trabajo digno, a la asistencia social, a la salud y a la educación, agudizan la conflictividad social y las violencias, traducidas en múltiples problemas que requieren abordajes urgentes mediante políticas estatales activas.
Ante la decisión del gobierno nacional, los datos locales dejan en evidencia que el esfuerzo de la provincia de Buenos Aires y los municipios, afectados por la restricción presupuestaria, resultan insuficientes frente a la enorme necesidad.
Esta realidad dramática e injusta nos afecta como sociedad y nos moviliza, para plantear que el hambre es un problema de toda la comunidad, no sólo de quienes lo padecen.
La vida en los barrios populares se precariza y se degrada al ritmo del crecimiento de la crisis en sus múltiples dimensiones, dando lugar a situaciones cada vez más desesperantes, tales como: el crecimiento de consumos problemáticos de sustancias, de situaciones de padecimiento mental, de personas en situación de prostitución, de familias en situación de calle, de narcomenudeo con presencia de narcotraficantes, entre otras que muestran un complejo entramado de poder y violencia en las comunidades. Esta crisis compromete el bienestar y el futuro de nuestras infancias y juventudes, y nos interpela a preguntarnos qué tipo de sociedad queremos ser.
En este marco, proponemos una JORNADA bajo la consigna: EL HAMBRE ES URGENTE. LA REGIÓN SE ORGANIZA, para el día jueves 8 de agosto, desde las 12 hs., en el rectorado de la UNLP, con el propósito de involucrarnos como comunidad en el abordaje de esta problemática social. Iniciaremos la Jornada con una olla popular, luego trabajaremos en comisiones con la elaboración colectiva de propuestas de políticas y/o posibles programas públicos que fortalezcan la articulación regional en pos de favorecer el acceso a alimentos y servicios esenciales. Es deseable que podamos organizarnos para construir acciones solidarias que acompañen el esfuerzo de las organizaciones de la comunidad, coordinando esfuerzos y estrategias con organizaciones de la agricultura familiar y con nuestro cordón frutihortícola.
Les esperamos.