A pocos minutos del comienzo, una autoridad de salud ingresó al campo de juego para detener el partido a las Eliminatorias Sudamericanas para el Mundial de Qatar 2022.
El encuentro que comenzó en el Estadio del club Corinthians con la selección Argentina frente a Brasil, fue interrumpido por autoridades de salud de San Pablo y luego suspendido por el árbitro Jesús Valenzuela por cuestiones sanitarias de parte de jugadores argentinos.
Emiliano Martínez, Emiliano Buendía, Cristian Romero y Giovani Lo Celso no debían estar presentes por un tema sanitario ya que en el formulario de ingreso al país, completaron que en los últimos 14 días no habían estado en Reino Unido, algo que no era así.
Antes del partido, la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (Anvisa) se comunicó con la policía federal para que impidieran la salida de estos futbolistas pero los cuatro se subieron igualmente al micro y parecía que estaba todo resuelto, hasta que una autoridad de salud se metió en el campo de juego a los pocos minutos.
La postura de la Selección Argentina ante esta decisión de las autoridades de Brasil fue la de retirarse al vestuario debido a que, si no jugaban todos los futbolistas, no jugaba ninguno.
A pesar de que Conmebol reiteró que la burbuja sanitaria a la que se someten todas las selecciones antes de las Eliminatorias habilita a los futbolistas a jugar, Anvisa volvió a insistir con la inhabilitación de los mismos
Tras salir del Estadio, el técnico de la selección Argentina, Lionel Scaloni habló de lo sucedido: “Me pone muy triste, no busco ningún culpable. “Tenía que ser una fiesta para todos, termina en esto”
Además, Scaloni expresó que un delegado de la Conmebol les dijo que se vayan vestuario: “En ningún momento se nos avisó que no podía jugar el partido. Tengo que defender a mis jugadores. Si entra gente que se los querían llevar, deportar, no hay ninguna chance”