El comedor de la Universidad Nacional de La Plata retomará su actividad plena a partir del próximo lunes, con el funcionamiento de sus cuatro sedes.
Hasta ahora habían abierto sus puertas las del Bosque Oeste, de 50 entre 116 y 117; y la del Bosque Este, ubicada en 120 entre 61 y 62; pero a partir de la semana próxima se sumarán la sede ATULP, de 44 entre 9 y 10; y la del Club Everton, ubicada en 14 entre 63 y 64.
Los responsables del comedor adelantaron que en las cuatro bocas de expendio se podrán adquirir los tickets a un valor de 100 pesos y también retirar las viandas del mediodía.
Para llevarse el almuerzo es condición indispensable que cada estudiante se acerque con un recipiente limpio y apropiado para transportar los alimentos. Para ello existen además diferentes bandas horarias diseñadas para evitar la aglomeración de estudiantes al momento de retirar su comida y por ello las viandas se entregan a las 11.30, 12.15, a las 13 y 13.45.
En lo que respecta al turno noche, el sistema utilizado es idéntico al de los mediodías, es decir que los estudiantes deben retirar sus viandas para llevar. Pero es importante aclarar que, en este caso, el retiro de las porciones sólo se realiza en el comedor de calle 50, de 17 a 19. El valor del ticket también es de 100 pesos y también incluye opción de menú para celíacos.
Los menús previstos son tallarines o ñoquis con salsa bolognesa, medallones de merluza o de pollo con ensalada de vegetales crudos, pollo al horno con ensalada de vegetales crudos, risotto de pollo, pastel de zapallo (con carne), cazuela de arroz con pollo, y pastel de papas (con carne). En todos los casos incluye una fruta de estación como postre (banana, manzana, naranja, mandarina, pera). Todas las comidas son elaboradas bajo la supervisión de profesionales nutricionistas.
Los estudiantes que se acerquen al comedor por primera vez deberán hacerlo con una foto carnet y un certificado de alumno regular. En el caso de los ingresantes 2022, tendrán que presentar una foto y la constancia de inscripción a la UNLP.
El comedor reabrió sus puertas para los almuerzos tras permanecer cerrado durante casi dos años, por las restricciones impuestas por la pandemia. Durante la época de aislamiento, la UNLP no suspendió el beneficio, sino que puso en marcha la denominada Beca de Comedor en Emergencia. Se trataba de un subsidio económico con la finalidad de que los estudiantes pudieran adquirir alimentos mientras el establecimiento permaneciera cerrado.