El actual Arzobispo platense confesó cuál fue su respuesta inicial al cargo que le ofreció Francisco y cuándo será su despedida en la ciudad.
En una sorpresiva noticia que impactó en la comunidad católica, el Papa Francisco ha designado al actual Arzobispo de La Plata, Víctor Manuel “Tucho” Fernández, como responsable del Dicasterio para la Doctrina de la Fe. Este nombramiento sitúa al arzobispo Fernández al frente del ministerio más importante de la Iglesia, encargado de cuestiones doctrinales y de investigar casos y juicios relacionados con la pederastia, entre otros temas.
Con 60 años de edad, “Tucho” Fernández asumirá su nuevo cargo a mediados de septiembre, reemplazando al cardenal jesuita Luis Ladaria Ferrer, quien ha alcanzado la edad límite para los cargos ejecutivos de la Curia. La noticia fue revelada a través de una carta enviada por el arzobispo, en la cual compartió los detalles de su llamado por parte del Sumo Pontífice y expresó su sorpresa ante este nombramiento.
En sus palabras, Tucho confesó que inicialmente rechazó la oferta del Papa debido a que no se sentía capacitado para la tarea encomendada. Sin embargo, Francisco insistió en su solicitud, especialmente durante su reciente hospitalización y aceptó finalmente el cargo.
“Les confieso que estuve un mes cortando clavos, porque no tenía ganas de irme”, se sinceró el arzobispo. “Un mes atrás le dije al Papa que no aceptaba. Lo hice con todo el dolor del alma, porque él está mayor, necesita gente de confianza cerca, él es un grande y yo estoy muy agradecido por tanto bien que recibí de él. Pero le dije que no y me quedé con esa espina”, sumó.
Francisco le pidió a Tucho que se encargue de “la doctrina de la Fe”, es decir, “que se promueva el pensamiento cristiano, la profundización de las verdades de la fe, el estudio de los grandes temas en diálogo con el mundo y con las ciencias”.
“No me quiero ir sin despedirme y sin dejarles una sentida bendición. Por eso los invito a la Misa de despedida que será el sábado 5 de agosto a las 16 hs. Pocos días después ya viajaré a Roma para poder empezar en septiembre mi tarea con todo acomodado”, cerró en su carta.
La noticia del nombramiento de Fernández generó cierto revuelo en la Arquidiócesis de La Plata, mientras los fieles expresan su agradecimiento y deseo de éxito en su nueva tarea. Su partida en agosto marcará el final de un importante capítulo en la vida religiosa de la ciudad, pero su influencia y liderazgo perdurarán en la memoria de aquellos que han sido guiados por su compromiso pastoral.