La familia de la joven que recibió un disparo en Altos de San Lorenzo organiza una marcha para pedir por el esclarecimiento de su presunto suicidio.
La familia de Gisela Jorgelina Villagrán, la joven de 18 años que fue hallada con un disparo en la cabeza en una casa de Altos de San Lorenzo, convocó a una movilización este sábado para pedir que se investigue a fondo el caso. La marcha partirá a las 17 desde 31 y 60 hasta 31 y 76.
Si bien en principio se informó que el arma que puso fin a la vida de la joven pertenecía a su pareja, un miembro de la Policía Federal Argentina; la hermana de Villagrán, Dana Lemos, que el hombre no era su novio sino que solo habían salido durante 2 meses y, además, no vivían juntos.
Mientras avanza la investigación, amigos, allegados y familiares de la joven, que perdió la vida pese al esfuerzo de los médicos, se movilizarán sin “banderas de ningún partido político” y de manera totalmente pacífica para exigir el esclarecimiento del caso.
En este contexto, Lemos denunció que el policía, quien encontró a la joven sin vida, había amenazado a Gisela con quitarse la vida en alguna ocasión y que ella accedió a estar con él a raíz de ese tipo manipulaciones. La familia de la joven sostiene que ella no sabía usar un arma, ni cómo se cargaba y destacan, además, que la chica era era diestra pero la investigación preliminar habría indicado que el arma con la que se habría quitado la vida estaba en su la mano izquierda.
El hecho que conmocionó a La Plata
Villagrán fue hallada el pasado 14 de febrero en una casa de 31 entre 75 y 76 con un disparo en la cabeza. Según la versión oficial, Gisela se disparó a sí misma con el arma reglamentaria del dueño de la vivienda en la que fue hallada, lo que llevó a caratular el hecho como “tentativa de suicidio” y, tras su fallecimiento, como “suicidio”. Los familiares de la joven, sin embargo, rechazan esa hipótesis y piden que se profundicen las pericias.
Tras lo sucedido, la hermana de la joven expresó en una publicación de Facebook sus sospechas sobre lo ocurrido y contó que, ese día, Gisela recibió un mensaje en su celular y salió de repente diciendo que iba a ver a un amigo, pero dos horas después ocurrió la tragedia. Desde entonces su familia reclama que las autoridades pongan la lupa sobre el efectivo.
El hombre apuntado le indicó a las autoridades que cuando regresó a su casa encontró a Villagrán herida, junto a la pistola. No obstante Dana cuestionó esta versión y remarcó que el oficial mintió al decir que su hermana ya le había querido sacar el arma dos veces. “Si hubiese sido así, ¿qué hacía su arma cargada?”, planteó al respecto.
La hermana también aseguró que la relación entre Gisela y el hombre estaba marcada por el control y los celos. “Nosotras mismas la convencimos de que dejara esa relación que había empezado como niñera de los hijos de este tipo, porque él la controlaba todo el tiempo y la celaba y era mucho más grande que ella”, manifestó respecto del policía, que supera los 40 años.
En su denuncia pública, Lemos reveló además que el agente habría hostigado y presionado a la joven para retomar su vínculo: “Le decía que si no volvía con él, se iba a matar. Inclusive cuando ella le estaba diciendo que no lo quería ver más, se arrodilló y le pidió matrimonio”, narró al respecto.
La investigación sigue su curso
Mientras tanto, el caso avanza sin pausa en la Justicia. Las autoridades buscan determinar con exactitud las circunstancias del hecho y para ello esperan el resultado de pericias que serán claves. En la escena se secuestraron una pistola Bersa TPR 9 y una vaina servida.