Casi una docena de personas se encuentran internadas, según se sospecha, por el uso de fentanilo contaminado.

Un grave brote de infecciones invasivas severas, presuntamente originado por ampollas de fentanilo contaminadas, ha causado la muerte de nueve personas y afectado al menos a once más. El foco del caso se sitúa en el Hospital Italiano de La Plata, lo que llevó a la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) a prohibir la comercialización de todos los productos de un laboratorio.
El analgésico inyectable implicado fue producido por Laboratorios Ramallo, ubicado en la provincia de Buenos Aires. La ANMAT informó que la empresa no cumplía con las buenas prácticas de manufactura. Además, la distribuidora HLB Pharma, con sede en San Isidro, también está bajo investigación y acumula prohibiciones previas.
Las ampollas contaminadas pertenecían al lote 31202 de fentanilo HLB, con vencimiento en septiembre de 2026 y fabricación en diciembre de 2024. “Las autoridades sanitarias nacionales confirmaron […] la contaminación con las bacterias Klebsiella pneumoniae productora de metalobetalactamasa (MBL) y Ralstonia pickettii”, informó el diario La Nación. Estas bacterias fueron detectadas en pacientes del Hospital Italiano de La Plata, donde se originó el brote.
Los pacientes afectados presentaron síntomas como fiebre, bacteriemia e hipotensión, y en la mitad de los casos la infección derivó en un shock séptico fatal. “Según añadió La Nación, las muestras de los 18 pacientes internados en La Plata fueron enviadas al Instituto Malbrán, que también analiza dos casos similares reportados en instituciones de Rosario”, elevando la cifra potencial de afectados a 20.
La ANMAT ya había sancionado previamente a HLB Pharma y Laboratorios Ramallo. En febrero, se ordenó el cese de actividades de este último por graves deficiencias en sus procesos, incluyendo el retiro del mercado de ampollas de propofol inyectable sin autorización.
En la última semana, además del lote de fentanilo, el organismo prohibió la venta de diclofenac sódico (lote 80020) y morfina al 1% (lote 31050), también vinculados a contaminación cruzada. Estos incidentes fueron calificados por la ANMAT como “desvíos críticos de calidad”, debido al alto riesgo que representan para la salud pública.