El arquero uruguayo, figura en Galatasaray, llega al Pincha con mentalidad ganadora y ya piensa en la final del 9 de julio.

Luego de estar 14 años en Europa, Fernando Muslera regresó al continente para sumarse al plantel de Estudiantes. Tras su paso Galatasaray turco, donde dejó su marca como ídolo, el arquero de 39 años llega para reforzar una posición que trajo debate durante el pasado semestre.
Ni bien pisó suelo argentino, el arquero uruguayo demostró estar listo para llegar y jugar sin problemas: “Estudiantes es un equipo con historia, mucha jerarquía y cosas en juego. Ya el 9 de julio tenemos una final“, avisó el guardameta, en referencia al duelo contra Vélez por la Supercopa Internacional que se disputará en el estadio de Independiente.
Muslera llega, obviamente, para adueñarse del arco albirrojo, lo que podría precipitar la salida de Matías Mansilla. El uruguayo fue contundente sobre su objetivo inicial, aunque para ese partido decisivo del 9 de julio no estaría habilitado, ya que los clubes argentinos pueden incorporar refuerzos oficialmente recién desde el 7 de julio. Tanto Estudiantes como Vélez han solicitado modificar esta normativa para poder utilizar a sus nuevas incorporaciones, lo que ha llevado, además, a que la fecha de la definición se pasara al 9 de julio.
Otro de los grandes desafíos que afrontará Estudiantes con el comienzo de la “era Muslera” será la Copa Libertadores, donde en los octavos de final se medirá con Cerro Porteño: la ida será el 13 de agosto en Asunción y la vuelta, el 20 del mismo mes, en La Plata.
Muslera llega con una notable continuidad, avalada por los 43 partidos disputados en la última temporada y la consagración en la Superliga de Turquía, donde incluso convirtió un gol. Además, mantuvo su valla invicta en 13 oportunidade.