Un conductor de taxi protagonizó un fuerte accidente contra un vehículo estacionado en 162 entre 24 y 25.
Un incidente vial de alto impacto conmociona a la comunidad de Berisso. Un taxista que circulaba con pasajeros a bordo de su vehículo protagonizó un fuerte accidente de tránsito al impactar contra un auto estacionado. Lo que siguió al choque generó una fuerte polémica: el conductor se negó a realizarse el test de alcoholemia.
El siniestro tuvo lugar en la calle 162, entre 24 y 25. Al llegar al lugar, las autoridades de la Policía Bonaerense y la Dirección de Seguridad Vial local confirmaron que el taxi había colisionado contra una camioneta que se encontraba estacionada, sin que hubiera un motivo aparente que justificara el impacto.
Los agentes de tránsito, siguiendo el protocolo, le realizaron al taxista una primera prueba: el alcotest, que determina de forma preliminar la presencia de aliento etílico. El resultado, en este caso, fue positivo.
A raíz de ello, el personal en el lugar se dispuso a realizar el test de alcoholemia, la prueba clave que mide el nivel de alcohol en sangre de una persona. Sin embargo, el taxista, en una decisión que lo dejó en el centro de las críticas, “se negó a realizar esta última prueba”.
En ese marco, las autoridades locales indicaron que la situación se tornaba aún más grave: “el hombre no iba solo, sino que dentro del vehículo también iban tres chicos”. Afortunadamente, y a pesar de la magnitud del impacto y la irresponsabilidad del conductor, todos los menores resultaron ilesos.