Esta decisión deja trunco el proyecto de extensión del servicio hasta el Hospital San Juan de Dios —inaugurado hace solo un año— y pone en duda la continuidad de la tercera etapa que debía alcanzar Los Hornos, un plan impulsado por la Universidad Nacional de La Plata (UNLP).
La decisión de Trenes Argentinos Infraestructura (ADIF) de suspender el señalamiento en el Tren Universitario se concretó a través de la figura de “extinción de mutuo acuerdo del contrato” con la firma Autotrol, encargada de la infraestructura. Este mismo mecanismo ya fue utilizado para rescindir otras obras vitales del Tren Roca, como las estaciones Quilmes Sur, Universidad de Almirante Brown y Hospital Ezeiza.
El recorte deja sin terminar un tramo esencial para miles de estudiantes, docentes y trabajadores de la capital bonaerense. Además, pone en seria duda la concreción de la tercera etapa del proyecto, que tenía previsto llegar hasta Los Hornos y los antiguos talleres de Gambier.
Si bien el Gobierno nacional suele justificar estas paralizaciones en el “ahorro fiscal”, la lectura en el ámbito local es crítica. Según trascendió, las suspensiones previas en el Roca ya le costaron al Estado cerca de 264 millones de pesos, desmintiendo el supuesto beneficio económico. En La Plata, la percepción es que lo que se ahorra en la planilla, se pierde en conectividad y desarrollo.
Desde la órbita nacional, se sostiene que la obra del Tren Universitario no fue incluida en la lista de proyectos de la “emergencia ferroviaria” al no ser considerada prioritaria para la seguridad operacional. Sin embargo, la realidad de la ejecución muestra contradicciones, con muchas obras declaradas “prioritarias” que también están demoradas, sin licitar o canceladas.
