Las familias se aceraron hasta el primario del colegio Santa Ana en busca de respuestas por el caso de abuso sexual que conmociona a la comunidad educativa.
Padres que llevan a sus hijos al Colegio Santa Ana se manifiestan en la mañana del martes frente a la escuela primaria, ubicada en 511 entre 26 y 27. Ahí cortaron la calle con ramas de los arboles con el fin de quedarse hasta obtener alguna respuesta por parte de las autoridades.
Una madre que lleva a su hijo al colegio aseguró a 0221.com.ar que la víctima es una chica que asiste al colegio, actualmente está cursando en el cuarto grado y todo salió a la luz cuando la pequeña le contó a sus padres lo que había pasado con el sacerdote.
A partir de allí, el caso se conoció dentro de las instalaciones y terminó con una maestra de la institución renunciando a su cargo, según aseguraron los propios padres y madres de los alumnos.
Lo cierto es que este martes un grupo de padres se acercó hasta la escuela para poder averiguar lo que estaba sucediendo. Ahora, la comunidad educativa exige respuestas más concretas con los representantes legales del colegio, que hasta el momento no atienden los teléfonos y no dieron ninguna información al respecto.
LA DENUNCIA POR ABUSO SEXUAL
La comunidad educativa del colegio parroquial Santa Ana de La Plata está conmocionada. El presunto caso de abuso a una chica provocado por el sacerdote que trabaja allí fue denunciado y se conoció en las últimas horas. El hecho, según trascendió, habría ocurrido el año pasado y hasta el momento los padres no tuvieron respuestas por parte de las autoridades.
El hombre en cuestión es el Presbítero Maximiliano Di Virgilio, quién es acusado de haber sido protagonista de un abuso infantil dentro del establecimiento. La denuncia fue realizada en noviembre del 2021 y la víctima habría sido abusada en las instalaciones del colegio.
En un comunicado que se difundió, afirmaron que “no se han arbitrado las medidas pertinentes” ya que “hasta el día de la fecha la representación legal de la institución no ha resuelto esta grave situación y el sacerdote no ha sido apartado de su lugar” por lo que continuaría en contacto con menores de edad.
“Toda la comunidad educativa está consternada por considerar que no se han arbitrado las medidas pertinentes”, expresaron.