Edelap aseguró que en todos los casos se dejó acreditada la existencia de hurto de energía y que harán las respectivas denuncias penales.
Personal de la empresa Edelap realizó tareas antifraude para identificar y desarticular conexiones ilegales que afectan la calidad de servicio que reciben los usuarios. En el operativo nocturno se detectaron varias conexiones clandestinas, que ahora deberán afrontar los costos de la energía consumida.
Los locales sancionados son: gimnasio “Hammer”, de 20 entre 45 y 46; en el restobar “Pampa y la vía”, de 17 entre 70 y 71; en la heladería “Don Fresquete”, de 143 entre 50 b y 52; y en el galpón de alimentos de 27 entre 63 y 64. En todos los casos se dejó acreditada la existencia del hurto de energía mediante acta de escribano público y policial, y se procederá a con las respectivas denuncias penales.
Además, se registraron medidores adulterados y conexiones directas en una pescadería, una panadería y una colchonería ubicadas en 60 y 131 y en la casa de hamburguesas de 136 entre 65 y 66.
Según indicaron desde Edelap, el robo de energía, en sus distintas metodologías, genera excesos de consumo no registrado que sobrecargan los tendidos, los dañan y provocan una disminución en la calidad de servicio que reciben los usuarios vecinos que están correctamente conectados, generando problemas de tensión o cortes por manipulación indebida de las redes.
La empresa procederá a efectuar el cobro de la energía consumida en forma ilegal a los usuarios involucrados, incluyendo las penalidades correspondientes conforme lo establece el Reglamento de Suministro y Conexión. Además, se denunciará penalmente a los usuarios que fueron detectados con estas conexiones clandestinas y a quienes ofrecen el servicio de conexiones ilegales y distintas maniobras para manipular las instalaciones eléctricas.
Robar energía es un delito penado con prisión de hasta 6 años, que además pone en riesgo la vida de quien la manipula y de terceros, perjudicando asimismo la calidad del servicio eléctrico.