Los investigadores creen que el miembro de la mafia china Ke Deqiong tuvo ayuda para huir y una foto complica a los agentes de la seccional donde estaba preso.
El escándalo por la fuga de un peligroso preso de la comisaría Primera, acusado de formar parte de la mafia china que extorsiona a supermercadistas en La Plata; sumó un nuevo capítulo en las últimas horas, luego de que un hombre diera a conocer una sugestiva imagen en la que puede verse a varios agentes policiales de la citada seccional reunidos con representantes de la comunidad a la que pertenece Ke Deqiong, el detenido que se fugó en pleno centro platense y por estas horas es intensamente buscado.
La imagen podría complicar aún más la situación de los efectivos que formaban parte de la guardia nocturna que cumplía tareas en la comisaría ubicada en 53 entre 9 y 10 cuando Deqiong escapó sin dejar rastros. La investigación quedó en manos de la fiscal Virgina Bravo y la Auditoría General de Asuntos Internos del Ministerio de Seguridad bonaerense y, de acuerdo con las primeras pericias, el sospechoso huyó extrañamente sin realizar boquetes y forzar las rejas o las cerraduras de su celda.
La investigación sobre la fuga del jefe de la mafia china en la ciudad apunta ahora en dirección de los efectivos que debían cuidarlo y es que los pesquisas coinciden en que difícilmente la fuga podría haberse concretado sin una ayuda interna. El comisario a cargo de la seccional, Julio del Dago, fue separado momentáneamente de su cargo, los libros de guardia de los últimos días fueron secuestrados y lo mismo ocurrió con los celulares de los agentes que se encontraban en el lugar cuando todo sucedió. Por ahora ninguna hipótesis se descarta.
Pero tal vez lo más llamativo del caso se haya dado a conocer en las últimas horas, con la viralización de una imagen que despertó una fuerte polémica en las redes sociales: un hombre dio a conocer una foto en la que puede verse cenando, días antes de lo sucedido; a varios de los efectivos que cumplen funciones en la comisaría Primera y miembros de la comunidad china que podrían estar vinculados a Deqiong. Aunque la imagen por sí sola no es prueba de ningún acuerdo, generó fuertes suspicacias entre los vecinos y podría convertirse en un elemento clave para la investigación en curso.
Ahora todas las miradas están puestas en los agentes que formaban parte de la guardia nocturna apostada en el lugar, compuesta por varios efectivos y un subcomisario. La fiscal Virginia Bravo, quien quedó a cargo de la investigación, ordenó el secuestro de los libros de guardia de los últimos dos días y secuestró los celulares de los agentes que estuvieron en el lugar, mientras que el titular de la seccional, el comisario Julio del Dago, fue desafectado de la Fuerza mientras avanza la investigación.