Se generaron serios destrozos en medio de una fiesta clandestina que incluyó alcohol, música y hasta picadas en pleno Paseo del Bosque.
En la madrugada de este lunes el Bosque volvió a ser elegido como escenario una nueva fiesta clandestina realizada por cientos de jóvenes que llegaron de todos los rincones de La Plata para compartir la noche.
Sin ningún tipo de control ni respeto por las medidas sanitarias para evitar la propagación del coronavirus, el masivo encuentro que incluyó música, alcohol y hasta picadas, terminó de la peor manera: con autos destrozados y hasta motos completamente en llamas.
El descontrol, incluso, encendieron la mecha de un nuevo cruce entre las autoridades locales y las provinciales.
Varios patrulleros fueron filmados, incluso, en las inmediaciones del Bosque, a pocos metros de donde la fiesta tenía lugar y en la que finalmente debió intervenir personal de la Secretaría de Convivencia y Control Ciudadano.
Durante la madrugada de este lunes los desmanes llegaron a su punto más álgido, cuando algunos de los jóvenes prendieron fuego una moto que quedó completamente destruida.